No estoy deshecha ni triste, mas siento una combinación de ambos. Hace unos días me enteré que el chico del quien estuve enamorada más de 4 años había sido padre… No sabéis como me dolió. Después de tantas promesas tontas y palabras de amor… Todavía confiaba en la idea de estar juntos, pues jamás los estuvimos. Ni besos ni caricias.
Con el corazón en el puño, con la garganta seca y con las manos temblorosas, ayer le escribí felicitándole por su reciente paternidad. Creo que le sorprendió el hecho de que yo lo supiera. Honestamente, solo le escribí porque quería que viese que había madurado, que ya no era aquella niña de 11 años que le espiaba desde la terraza y lo metía en problemas. He madurado. Y mucho. Su niña es hermosa. Jamás imaginé que me podría encontrar en esta situación…
Entre una cosa y otra, salió el tema de “nosotros”. No pude contener las lágrimas. Ante mis ojos pasaron todas las cosas que me imaginé con él, nuestro primer beso, nuestra primera cena,... Todo ello se quebró de repente. Dice que aún me quiere.
Dudo de que haya madurado. ¿O sí? ¿Todavía le quiero?
Siempre será mi primer amor.
wauuu!!! sin duda a lo largo de nuestra vida tropezamos con personas a las que apreciamos demasiado. No obstante para mi madurar es que esas personas junto a esas promesas que te hacen... Pueden que se rompan, y habrá que asumirlo con coraje por mucho doloroso que sea. Sin embargo también pienso que cada persona tiene su manera de pensar en respecto a " madurar", pero para mi ese acto que has echo por muy doloroso que es... Estas madurando. (Eres una caja de sorpresas xD)
ResponderEliminarLos sueños de un soñador.
Jaja sí, yo también creo que todos tenemos nuestra propia definición de madurar, yo simplemente digo que lo he hecho porque de niña era muy muy mala pero que muy muy mala jajaj y comparada con ahora, pues he madurado un montón :`)
EliminarUn beso!